domingo, diciembre 17, 2006

La princesa de la autopista

El viernes a propósito de una respuesta un poco lerda que le di a mi querido amigo, el me soltó un "¿como vas a ser a los treinta?", como queriendo decirme que mi mentalidad es de una vieja de porquería.
Eso me causo un poco de lata pero también risa, hubiera querido decirle lo equivocado que está, tal vez el cree conocerme mucho, pero no conoce ni la milésima parte de quien soy ni de lo que puedo llegar a ser... jajaja
Esto se sumo a otros comentarios que me llegaron acerca de mi persona, y que si me dolieron un poco más, y no pude evitar preguntarme como me ven las demás personas, y porque algunas tienen ideas tan equivocadas de mi. Quizás yo estoy enviando mensajes errados y por eso no me ven como realmente soy.
Esto trae a mi memoria esta canción, que durante mi niñez cantaba a voz en cuello y con la radio a todo volumen. Entonces me imaginaba a esta edad recorriendo las carreteras en un descapotable negro, acompañada de mi guitarra y de algún chico guapo.
Lo cierto es que nunca aprendí a manejar ni a tocar guitarra... y el chico guapo?, tiene cinco años y está dormidito en su cama. Pero en mi corazón sigo siendo una rebelde y mi mente está mucho más abierta de lo que mi amigo piensa. Tal vez nunca recorra las carreteras en busca de mi destino, pero al menos se lo que quiero y tengo claros mis principios y eso me deja en paz, la aventura?.... ya llegará.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es dicifil darle en el gusto a la gente y al mismo tiempo ser consecuente con uno mismo, supongo que al final del día lo importante es haber tenido una vida feliz. Asi que al diablo lo que los demás digan solo debes preocuparte de ser feliz